arándanos

Cómo desarrollar productos de calidad para la salud a partir del arándano

El arándano es considerado un cultivo menor con una gran marca de consumo. En buena parte del mundo, esta pequeña fruta está llamando, cada vez más, la atención de los consumidores como uno de los «superalimentos» a incluir en la dieta. No es extraño, pues, que durante la pandemia de Covid-19 su demanda haya aumentado de forma significativa, para su consumo fresco y como ingrediente clave de complementos alimenticios y productos para el cuidado de la salud 

En los últimos años, la producción mundial de arándanos está en claro crecimiento. Si en 2018 superaba ligeramente el millón de toneladas, en 2019 subió hasta 1.276.820, y en 2020 llegó a 1.387.700, de las cuales 962.050 correspondieron a producto fresco y 425.650 a arándanos procesados. 

La comunidad científica está de acuerdo en que nos encontramos ante un «superfruto», pero para potenciar sus virtudes, ser capaces de desarrollar productos que contribuyan a mejorar la salud de las personas e introducirlos en el mercado, hace falta el conocimiento técnico y los equipos adecuados. 

¿Qué es el arándano? 

El arándano es una pequeña baya carnosa, fruto de la planta del mismo nombre o Vaccinniummyrtillus, originaria de las montañas de Europa y Norteamérica, aunque en la actualidad se cultiva en multitud de países y, de hecho, los territorios andinos, como Perú y Chile, son de los mayores productores del mundo. 

Existen múltiples especies de arándanos, pero se agrupan en dos variedades principales: rojo (cranberry) y azul (blueberry). La principal diferencia entre ellas, además del color, es el sabor y el tamaño. El arándano rojo es más grande y ácido, por lo que se comercializa sobre todo procesado y como ingrediente de complementos alimenticios, mientras que el azul, más dulce, se suele consumir fresco. 

En cuanto a las propiedades nutricionales y para la salud, son similares, si bien es el arándano rojo el que se utiliza en la elaboración de productos para la prevención y tratamiento de afecciones urinarias. 

¿Cuáles son los activos del arándano? 

Los arándanos son muy nutritivos, ricos en fibra, vitamina C, E y K, niacina, riboflavina, magnesio, potasio, fósforo y calcio, y están libres de grasas y sodio. Contienen 30 calorías por cada 100 gramos. 

Además de sus valores nutritivos, lo que los hace tan interesantes para el cuidado de la salud son sus activos, especialmente las proantocianidinas (PAC). El arándano rojo es rico en este polisacárido que dificulta la adhesión de la bacteria Escherichia Coli (E. Coli), causante de la mayoría de infecciones urinarias, a la pared celular de las vías urinarias. Las PAC de tipo A favorecen su eliminación a través de la orina, pues inhiben la expresión de fimbrias en las bacterias, y, sin su apéndice proteínico, no pueden adherirse a las células ni, por tanto, llevar a cabo el proceso de infección. 

En el mercado de los complementos alimenticios existe gran número de productos basados en las PAC del arándano rojo, que se consumen como preventivos en el caso de infecciones, como la cistitis, que se desarrollan de forma repetitiva. Hay que señalar, sin embargo, que, en aplicación de la Decisión de Ejecución (UE) 2017/1445 de la Comisión Europea, desde octubre de 2018 la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) no considera estos compuestos como productos sanitarios. 

Esto no invalida la efectividad de los activos del arándano. De hecho, estudios posteriores han incidido en sus propiedades antibacterianas. Es el caso del llevado a cabo en 2019 por investigadores de la Universidad McGill y el Instituto Nacional de Investigación Científica de Montreal, publicado en la revista Advanced Science. En concreto, señala que las PAC de los arándanos ayudan a potenciar la efectividad de los antibióticos frente a las bacterias y a evitar que desarrollen resistencia contra estos medicamentos. 

Las PAC no solo ayudan a inhibir la actividad de la bacteria E. Coli, sino que son también efectivas contra la Proteus mirabilis o la Pseudonomas aeruginosa, que intervienen en las neumonías y la gastroenteritis. 

El reto tecnológico en el desarrollo de productos con arándanos 

Durante el proceso de desarrollo de un complemento alimenticio basado en el arándano, hay que tener en cuenta cuestiones fundamentales para conseguir el mejor producto posible: 

  • Según la riqueza del extracto de arándano utilizado, habrá que calcular con precisión la cantidad necesaria a añadir a nuestra fórmula para alcanzar la dosis diaria recomendada. Se trata de un reto tecnológico que determinará la cantidad de comprimidos o cápsulas que el consumidor deberá tomar cada día. 
  • A la hora de formular el producto, habrá que tener en cuenta la compatibilidad del resto de ingredientes, para que no interaccionen entre ellos y evitar así el riesgo de que se produzcan cambios de color, apelmazamientos, o la degradación de alguno de los componentes. Además, la estabilidad del producto se debe mantener a lo largo de toda su vida útil.
  • El acondicionamiento del producto es un elemento crítico del proceso, pues lo debe proteger de las condiciones climáticas, como la luz y la humedad, y conservar sus propiedades durante toda su vida útil. 

Las peculiaridades de trabajar con extracto de arándano 

Un elemento clave para lograr productos con valor añadido es la selección del extracto de arándano. En el mercado, existen extractos que cuantifican las PAC sin especificar las cantidades de cada tipo, mientras que otros sí detallan cuántas son de tipo A; es decir, las que protegen contra las infecciones urinarias. Los extractos que cuantifican las PAC de tipo A tienen un precio más elevado, pero aportan valor añadido al producto final. 

Elegir un buen extracto es el primer paso, pero antes de poner el producto en el mercado habrá que garantizar que el contenido de proantocianidinas se mantiene estable en el tiempo. Para ello, es necesario recurrir a métodos de análisis de los activos, más o menos específicos en función de si se quieren cuantificar las PAC en general o también las de tipo A. Entre los métodos posibles, se encuentran el Dimetilaminocinamaldehído (DMAC), la cromatografía líquida (HPLC) o la espectrofotometría UV. 

En Sincromed contamos con los profesionales y los equipos tecnológicos para desarrollar productos para la salud de la mejor calidad a partir del extracto de arándano.